Una carrera que tiene sus detractores y entusiastas, pero que a nadie deja indiferente, dura y con un recorrido criticado y admirado a partes iguales, que transcurre por todo León, donde podemos ver las excelsas maravillas que jalonan nuestra ciudad, recorrido prácticamente llano auque con algún repecho considerable que pone a prueba nuestras piernas y nuestra mente.
Y así siete años después aquí estamos, en la salida de su séptima edición, enganchados al running, sin faltar en ninguna de ellas y después de perder la cuenta de todas las que hemos corrido entre medias.
A los que empezamos en la primera edición se nos ha unido mucha más gente hasta el punto de ser 2000 personas corriendo este año y mucha culpa de ello tiene el buen hacer de la organización de la carrera a cuya cabeza se encuentra LUIS CUETO y a los que todos tenemos que agradecer los esfuerzos y desvelos que realiza para organizar esta carrera, en una gran ciudad, en la que te tienes que "pegar" con instituciones, políticos ,policía,..., para conseguir sacar adelante esta Media de una forma tan brillante.
En cuanto al equipo, en esta ocasión debido a los distintos compromisos laborales, familiares y el respeto que infunde esta distancia, no nos presentamos en la línea de salida más que cuatro integrantes, Natalia, Javi, Edu y Pertejo, con distintos objetivos y una misma meta, DISFRUTAR.
El día era frío y el aire nos perjudicaba bastante, cualquiera que corra sabe que cuando se corre el aire siempre da de cara, independientemente de la dirección en la que corras.
A las 10:30 salimos del Hispanico con la intención de sufrir lo menos posible, y comenzamos una leve subida por la corredera, que nos desemboca en Santo Domingo, para continuar por Ordoño II, en estos primeros metros vamos en volandas con la ilusión y nervios de una nueva participación, todo ello acompañado por el numeroso público que se aglutina en esta zona.
Poco a poco se va estirando el grupo y cada uno va ocupando su lugar y mientras llegamos a la zona de eras de renueva, donde poco a poco el público desaparece y donde después del primer avituallamiento, tenemos la primera rampa ascendente que comienza a cargar las piernas, y empiezan las primeras dudas, “uffff voy muy rápido, hay que pensar en regular que esto es muy largo y sólo es km 5” quien no lo ha pensado en esta primera subida, pero rápidamente estos pensamientos dejan lugar a otros, cuando comenzamos a descender hacia el Musac,
Seguimos atravesando León hasta el km 10 donde se encuentra el paso que más nos emociona como buenos “cazurrines”, nos encontramos después de subir por la segunda dificultad del recorrido con nuestra querida PULCRA LEONINA, quien nos recibe con esa majestuosidad que la caracteriza insuflándonos de orgullo de pertenecer a esta Tierra y así con esa visión en nuestra retina, seguimos avanzando acumulando km y sufrimiento, todo ello esta vez en compañía del público que nuevamente nos acompaña en estos tramos del recorrido.
Llegamos a la zona del Parque de la Granja para desembocar a la parte baja de la Candamia, donde vienen a nuestra cabeza la multitud de horas y km recorridos por sus caminos, ya empezamos a notar el cansancio en nuestras piernas, y la cabeza empieza a preguntarse: “Que necesidad tengo de esto con lo bien que estaba en casa”, el aire no perdona y continua castigando el cuerpo pero…. Las peores batallas, son para los mejores guerreros y con ese pensamiento, con coraje y determinación se aprietan los dientes, y pensamos no hay vuelta atrás, no existe el abandono, se alarga un poco la zancada y se olvida el dolor que en mi caso llevaba acumulado desde el km 8 y que fui sufriendo hasta el final con las piernas muy cargadas.
Es en este punto donde a los que les quedan fuerzas empiezan a calcular tiempos y donde los que no (los más) empiezan a dosificar para simplemente llegar sin sufrir demasiado.
Y así seguimos, atravesamos el Polígono la Lastra subimos por José Aguado, hasta llegar a Fray Luis de León, donde nuevamente se empieza a aglutinar el público, ya queda menos escasamente dos kilómetros que pasan con la mente puesta en la satisfacción de que ya esta todo hecho, hasta llegar a la entrada del Hispánico, lugar donde ya todo da igual la sonrisa que todos llevamos en nuestro rostro, recompensa todo el sufrimiento acumulado, todas las horas de entrenamiento y así casi todos en mayor o menor medida de nuestras posibilidades esprintamos para entrar en meta, donde esta locura del runnig cobra sentido, recibimos las primeras felicitaciones de nuestros compañeros de fatiga y familiares, todo ya queda atrás ahora es nuestro momento, toca simplemente disfrutar.
Javi y Edu debutaron en la distancia y realizaron una gran carrera, de menos a más, acabando con buenas sensaciones y sobre todo con ganas de correr más medias maratones, mucho me temo que ya les esta picando "el bicho", bienvenidos a esta estupenda “enfermedad”.
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En la próxima carrera esperamos disfrutar lo mismo, o más que en esta. Hasta entonces….. a seguir entrenando!!!!.
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